jueves, 23 de agosto de 2007

HELENA

Ando a través de un pasillo de mármol, bancos llenos de gente a cada lado, y flores, muchas flores.
¿Una boda?
¿Un entierro?
Cada trozo de mi piel está de gallina, en la iglesia solo se oyen mis pasos y mi respiración forzosa. Quiero más aire del que puedo aspirar en una sola bocanada, todo visto a través de un tul que me tapa la cara.
Hay dos personas al final del pasillo, enfrente del altar.Al fondo, suspendida del techo alto y decorado con miles de santos y ángeles una cruz de madera interroga a todo el aforo. La caoba negra reluce por el barniz bajo la luz de las incontables velas suspendidas en el aire sin explicación lógica.
Quiero salir corriendo, ¿dónde estoy? ¿Qué hago aquí? Al final del pasillo una figura voltea la cabeza.
Es esa cabeza blanca con escamas, la cabeza de ese dragón, el dragón de mis sueños. Cierra los ojos azules y vuelve a voltear su cabeza para mirar adelante.
He llegado al final del pasillo.
Ella está allí. En el altar. De pié, más pálida que nunca. Su pelo rubio de muñequita rusa son más lisos que nunca (si eso es posible) y su vestido blanco contrasta con el mío negro y granate.
A un lado él, el de siempre, el culpable de todo, me mira con una sonrisa tierna que mas que ayudarme me asusta, viste de traje negro. Al otro lado, mi incansable amigo, blanco como siempre, con sus alas encogidas y sus grandes ojos azules cerrados.
Me siento en un juicio.
Allí dónde dicen que sopesarán lo que has hecho bien y lo que has hecho mal.
"No has sido tu quién a muerto" sentencia ella desde lo alto del altar, "déjame morirme en paz, desaparece"
Nada puede salir de mis labios pegados de secos que están.
"Ya no puedes hacer nada, me he ido. Te has quedado sola. Otra vez"
Me tiembla el labio de rabia, pero no digo nada.
El dragón blanco acerca su cabeza a mi, no necesita mover el cuerpo, pues su cuello es largo.
Acaricio su fría piel.
"Puedes irte, pero yo me quedo. A mi aún me queda esperanza. Vivo en un mundo que puede cambiar... vivo en un lugar donde cada primavera salen flores en los rincones, incluso en la basura. Vivo en un lugar dónde aún existe la fantasía y la ilusión. Yo decido vivir."

"Vives en un mundo en el que la gente se mata, dónde el amor se destruye a base de engaños y guerras. Dónde no hay respeto. Vives en un mundo en el que yo no puedo vivir."

"Entonces..." trago saliva "... Vete, muerete. Creo que todo irá mejor si yo me quedo por aquí"
Doy media vuelta, los bancos ahora están vacíos, el dragón viene conmigo, me sigue por el largo y frió pasillo.
Él sube un par de escalones y se acerca a ella. Ambos susurran "Adiós"
Abro las puertas del lugar, ni rastro de nada. Estoy en mi habitación. Tumbada en la cama.
Otro día en mi magnifico mundo.


----
Helena de My Chemical Romance, supongo que la estética me impactó tanto que al final soñé en una especie de entierro.



2 comentarios:

NiñaFlor dijo...

A veces, releo mis posts. Y cuando lo hago me doy cuenta de que me enrrollo bastante, y me digo a mi misma.
"Cuando son tan largos y raros fijo que nadie lo lee."
Y me da un poco de verguenza haberos contado cosas tan raras...on mis sueños.
XXX

Unknown dijo...

Anna!!
Espero que estes bien! Hace mucho que no me pasaba por aqui y tambien hace mucho que no hablamos! Necesito tus conversacioneeeeeeeeeeeeeeesss!!!!
Respecto a lo que dices, no tienes que avergonzarte, es tu blog y como tu dices, es tu mundo, en el puedes hacer lo que te plazca!!!
Un besito amore!